De forma unánime con 25 votos a favor, el Congreso de SLP otorgó el indulto a la potosina quien lleva 15 años en prisión.
Por Jazmín Viramontes
¡Sanjuana Libre!, ¡Sanjuana Libre!, resonó este jueves en el Salón de Pleno Ponciano Arriaga del Congreso del Estado de San Luis Potosí, luego de que los diputados y diputadas aprobaron este jueves el indulto por gracia a Sanjuana Maldonado Amaya, con 25 votos a favor, ninguna abstención y ningún voto en contra, marcando de esta manera un precedente en la entidad potosina.
Sanjuana se encuentra interna en el centro de reinserción social de “El Xolol”, del municipio de Tancanhuitz, San Luis Potosí, quien compurga una sentencia de 30 años de prisión ordinaria por el delito de secuestro agravado, de los cuales ha cumplido 15 años.
Se aclaró que al otorgarle el indulto, Sanjuana quedará en libertad inmediata, sin que con ello se considere inocente de la comisión del delito por el que fue procesada y sentenciada, por lo que tendría que cumplir aún con la sanción pecuniaria por la cantidad de $ 103, 900.00 (ciento tres mil novecientos pesos 00/100 M.N), más la reparación del daño, por la comisión del delito de secuestro agravado, aunque la Asociación Civil Perteneces, la cual busca defender personas privadas de su libertad injustamente, explicó que en el caso de Sanjuana no tendría que pagar dicha sanción, pues ya lo habría hecho con el tiempo que lleva en prisión.
“Esta sanción también se calcula en días, en el caso de Sanjuana el equivalente determinado por la ley es de 2,000 días y Sanjuana ha estado privada de su libertad 5,475 días. En otras palabras, *la pena privativa de libertad que ha cumplido Sanjuana ya ha cubierto la sanción pecuniaria*”, señaló la asociación en un comunicado.
Al finalizar la sesión, familiares de Sanjuana, integrantes de la asociación Perteneces, así como de otras organizaciones no gubernamentales que acompañaron el caso, celebraron la decisión que dará la libertad a la potosina.
“Todos felices, muy felices por lo que estamos pasando y agradecidos especialmente con el licenciado José Mario (de la Garza Marroquín), a la organización, la licenciada Alejandra, la licencia Daniela, el licenciado Jesús toda la organización y a todas las organizaciones que se unieron a esta causa, les agradecemos de todo corazón. (…) Está muy emocionada de que ya se va, va a disfrutar a su familia, los años que perdió, tantos años mucho dolor, mucho sufrimiento para mi familia, porque a veces no podíamos estar con ella, (…) mi suegro falleció con la esperanza, que iba a pasar”.