La diputada Guillermina Morquecho Pazzi exigió que se investigue el caso del Hospital Central Ignacio Morones Prieto (HC) quien pagó en 2016, cerca de 1.4 millones de pesos a la empresa fantasma identificada como Comercializadora Ismalog SA de CV por la compra de medicamento oncológico.
Dicha empresa forma parte de la supuesta nueva red de corrupción al interior del Congreso del Estado, misma que según un oficio emitido por la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Coepris) no tiene autorización oficial para comercializar ese tipo de medicamentos.
El domicilio fiscal de esta empresa fantasma se ubica en Quinta Gaviotas, Circuito Canarios 106, en el fraccionamiento Quintas de la Hacienda.
“Haríamos un llamado a que precisamente los medicamentos que se compren deben contener todas las normas rígidas precisamente por la Coepris, desconozco si realmente se compraron medicamentos que no estén regulados por la Coepris. Aquí lo que hay que defender y por lo cual yo me promulgó es que todos los medicamentos que se consumen en todos los hospitales clínicas públicas y privadas deben estar con base en la regulación de la Coepris”.
La congresista descartó que se repita una situación como la de Veracruz en la que se le inyectó agua con sal a niños con cáncer, sin embargo, dijo que se deben aplicar todas las autoridades para llegar al fondo de este tema.
“Nunca probaremos que se jugara, sobre todo que se pusiera en riesgo la salud de los potosinos.”